Hoy, de nuevo estoy aquí… en este rincón de la inspiración como le suele llamar mi familia a la mesa circular junto a un pequeño altar, donde suelo colocar mi computador para escribir, para empezar y culminar tareas y fantasear a veces, cuando el pensamiento crea y es difícil retener tantas ideas en la cabeza.
Bueno, estoy aquí una vez más… con un año y un día que se suman a mi edad, con la voluntad, con la libertad de decidir entre avanzar o detenerse a pensar, si lo que he estado haciendo: esta bien o está mal, con el tiempo que me has dado entre tanta inmensidad, con la mezcla de alegría y melancolía, de realidad y fantasía, de insatisfacción y esperanza. Y sólo escribo ahora por esta sóla razón: para dejar guardado en un cofre lo que no ha hecho posible mi concentración.
Tengo una lista larga de cosas por hacer… no he empezado por que al intentar, no me ayudaba el pensamiento que se había adormecido por una ilusión… y la emoción le acompañaba para evitar que yo, pudiera con mi esfuerzo vencer a las dos.
Más si no empiezo ahora, ¿terminaré?, es poco probable… más ya comencé y tengo que luchar para no ceder, a quién lo puede todo… ya invité. Si esos pensamientos inútiles, no se han rendido estando sóla, lo harán ahora que me acompaña Él.
manaveliza
